Parece un eslogan coreado por una multitud enfervorecida exigiendo a su gobierno una educación digna, sólo le falta rimar...pero no; simplemente es la denominación de una nueva asignatura que deberá estudiar las nueva generación de jóvenes que, excepto casos, todavía no están interesados en la polémica surgida a partir del enfrentamiento entre Iglesia Católica y Gobierno de la Nación.
No quiero profundizar demasiado en la raíz del mencionado enfrentamiento, pero si me gustaría desde aquí poner un punto de atención sobre determinadas cuestiones relativas a la asignatura en si misma.
- Siempre que se acomete la reforma de la Ley de Educación se va a dejar a una parte de la sociedad descontenta debido a la dificultad enorme que esto entraña, no obstante, en mi opinión existen puntos de mayor interés para reformar previamente a la ampliación de materias, ésto es por ejemplo (y además me afecta de cerca) la convivencia de dos lenguas oficiales en la impartición de materias. Creo que a nuestros jóvenes les será mas útil aprender Historia en inglés que en gallego; y por otra parte es cuestión de lógica que estudiando en dos idiomas no se aprenda perfectamente ninguno de ellos, si no que se lo digan a los correctores de exámenes universitarios.
- Si la Ley va a considerar que la Igualdad de Género es lo que actualmente vivimos, me gustaría que los docentes consultaran determinada Jurisprudencia claramente favorecedora de las mujeres tanto en Civil como en Penal pasando por Laboral. No debemos tratar de erradicar la desigualdad machista instaurando el feminismo.
- Y por último, pero no menos importante, me gustaría señalar que no todas las opiniones son igualmente respetables (diga lo que diga quien lo diga) y por ello aunque no esté de más conocerlas, existen muchos modos de hacerlo, no creo que sea necesario darle rango de asignatura académica.
De cualquier forma todo ésto no deja de ser en cierta forma un absurdo, ya que los docentes no dejan de ser personas, con sus virtudes y sus defectos y no máquinas programables y reprogramables en cada nueva legislatura.
7 comentarios:
Querido P:
Después de haberle ido echando diversos vistazos a su blog hoy me animo a contestarle a raíz de este artículo.
Vamos por partes:
Primeramente, el hecho de que se enseñe una asignatura como educación para la ciudadanía no tiene porque ser en ningún caso algo malo. Al contrario, los católicos deberían estar contentos, pues muchos de los valores éticos (esta asignatura no deja de ser parecida a ética)que se propugnan coinciden con la propia ética católica.
Segundo punto: No mezclemos churras con merinas. La mayor utilidad del inglés que del gallego es algo cuando menos cuestionable, máxime cuando quien recibe educación en gallego somos los propios gallegos, con lo cual es más que posible que en un futuro nos veamos impelidos a usar el gallego (al fin y al cabo vivimos en Galicia), que que todos emigremos en masa a Inglaterra o países anglófonos a trabajar. De todas maneras una cosa no quita la otra y podría propugnarse una educación que tanto nos formase en un buen nivel de gallego como de inglés. No creo que sea algo incompatible.
Tercer punto y óbice de que me haya decidido a insertar el comentario en cuestión: Bien, le reto a que me muestre usted jurisprudencia claramente favorecedora hacia la mujer de manera "injusta". Le recuerdo, o le hago saber, que tanto en España como en muchos países del mundo en mayor o menor grado las mujeres siguen sufriendo menoscabos tanto en su integridad física, psicológica, laboral y social. Para eso en Derecho gozamos de una figura que se llama "discriminación positiva", esto es, una serie de principios inspiradores con animo de corregir esa situación. Esta "discriminación positiva" se aplica siempre que existe algún colectivo desfavorecido o en situación de inferioridad por alguna causa, no sólo con respecto a las mujeres. Con respecto a la frase, y cito textualmente "No debemos tratar de erradicar la desigualdad machista instaurando el feminismo", creo que merece un comentario al respecto. Vamos a ver, el feminismo, señor P, es un movimiento que ha conseguido mucho en favor de la igualdad de géneros. No es algo malo, no es algo a evitar, a pesar de que haya gente (hombres en su mayoría) que hayan intentado darle un matiz peyorativo al término Feminismo. Repito pues que el fin último del feminismo es CONSEGUIR LA IGUALDAD REAL ENTRE HOMBRES Y MUJERES. No vea usted fantasmas donde no los hay. Creo que a lo que se refiere ud. es más bien al término "hembrismo", este sí que digamos sería el equivalente al másculino "machismo", en el cual se propugnaría una superioridad de género de las mujeres sobre los hombres.
De todas maneras, el hembrismo es algo residual, se lo digo de buena tinta,y los principios y valores que orientan la actual legislación y política social en favor de la igualdad son claramente feministas, pero no hembristas.
P.D: Las mujeres no somos entes castradores ni tenemos vaginas dentadas, a pesar de lo que diga Cronenberg ;)
Un saludo
Spider
Efectivamente, no confundamos churras con merinas, no tiene nada que ver el colectivo de católicos con la Iglesia. El consorcio de centros educativos católicos, como muchos otros católicos despiertos, se ha mostrado favorable a la asignatura de Educación para la Ciudadanía. No veo ningún motivo para iniciar esa cruzada por parte de los obispos, me parece pintoresco, la labor de la Iglesia no reside en imponer una forma de pensar ni mucho menos de creer, en mi humilde opinión espero que la Iglesia algún día deje de hacer el ridículo en estas cuestiones y acepte su papel en la sociedad al servicio de los demás (en nombre de Dios, claro está). Ambas asignaturas, religión y educación para la ciudadanía, pueden tener aspectos muy interesantes, pero dado que el contenido de una y otra, en lo que hace referencia a aspectos éticos sobre la sexualidad, el matrimonio y la familia, están en clara contradicción, y que el derecho sobre el tipo de educación moral que han de recibir los hijos corresponde a los padres, me parece evidente que ambas asignaturas deberían ser optativas y que cada familia elija la que esté más acorde con sus convicciones, con el fin, al mismo tiempo, de no favorecer más el caos, así se evitaría que en unas clases se diga a los alumnos A, y en otras B, pues ello les auto justifica para que opten por C; es decir, por lo que más les place en cada situación. Si a pesar de ello se quiere que Educación para la Ciudadanía sea obligatoria, deberían suprimirse de la misma esos contenidos morales discutibles, o permitir a los padres que puedan plantear la objeción de conciencia, aunque esto ya es harina de otro costal.
Pero bueno, el tema es peliagudo… y ya no quiero ni mencionar a los docentes, eso para otro día.
En cuanto a lo del gallego, que quieres que te diga… no comprendo ni comparto el que las horas lectivas se repartan entre gallego y castellano, creo que es un atraso, casi todos los de mi generación (la del 77, año arriba año abajo) hablamos gallego con un nivel de conversación fluido, oral, escrito, etc… y a ninguno nos impartieron clases en gallego. En cuanto a utilidades creo mucho más útil el inglés, aún cuando no emigremos a Inglaterra ni a países anglófonos (me parece un concepto cuando menos desfasado), y aun cuando trabajemos aquí al lado de casa, léase Cambados, Camariñas o Rabo de Galo.
En cuanto a la Ley de Género estoy en total acuerdo con spider, excepto porque el método (la tan conocida “discriminación positiva”…) no me parece el mejor, pero bueno, tampoco conozco uno más adecuado… así que es el mal menor.
Carpe Diem!
Querida arañita marciana:
Ante toda darte las gracias por tu comentario y la más efusiva bienvenida al Blog.
Respecto a tus puntualizaciones yendo tambien por partes:
1. Hablo de siempre desde el punto de vista de mi propia moral, no me gustaria que el gobierno, fuese cual fuese, educara en determinados valores a mis hijos...y mucho menos tratase de valores a cosas que no lo son.
2. Me reitero en mi idea de la incompatibilidad...lo ideal seria, no el bilinguismo si no el tetralinguismo o el pentalinguismo, pero la realidad es que tenemos ciertos limites y el bilinguismo educativo anglo-español me parece la mejor opción hoy por hoy.
3. Deberias revisar tus apuntes de Derecho (y de paso tu diccionario en la O) y mirar sin tantos prejuicios determinadas sentencias de Civil en lo referido a divorcios, maltratos...Esta claro que nuestros magistrados son humanos y que la norma tiene una interpretacion directamente proporcional a la imaginacion de su señoria y supongo que algunos la tienen enorme para dictaminar lo que a veces dictaminan.
Y por último te emplazo a que sigas visitando estas paginas, donde, en proximas entregas pretendo hablar de desigualdades en todas sus vertientes y explicar mi teoria (aunque quiza ya exista) de la balanza.
Estimado P, le contesto desde el trabajo, por lo cual mi comentario será bastante breve. De todas maneras cuando tenga tiempo me extenderé más.
Simplemente es respecto a que revise mis apuntes de Derecho Civil. Gracias por su sabio consejo, pero.....repasando repasando no encuentro ninguna sentencia referida a maltratos. Será porque quizás están englobadas en Penal???? Jejejeje
Lo siento, no me pude reprimir, tenía que decirlo....;-)
Hay que ver lo puntillosa que handa la peñita por aquí...joer, cometes un pequeño error y...¡¡¡ZAS!!! -ostia que Dios te crió...
En fin, mi comentario es al respecto de.....de lo que dijo...., en fin, iba a poner algo pero despues de leere los comentarios de la peña, pos ná...que siga la sangre corriendo ordia!!!!!!!!!
jajajajajajajajajajajaja y aún diría más jajajajajajaja
A mi me parece que esto no va a triunfar se coja por donde se coja. Nosotros, sin ir mas lejos, ya estamos metiendo los antimateriales de Educación para la ciudadanía y los damos porque sí. Y nadi nos tose ni media, excepto los homosexuales radicales.
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